Yo sigo preparando nuestro viaje
a La Provenza francesa y hoy he despejado el camino que nos llevara a visitar
Aix de Provenza.
Hace ya
unos años (concretamente el 14 de abril del 2012) realizamos un viaje a la Bretaña
francesa y en Paris nada más llegar en avión tomamos la furgoneta que habíamos reservado,
María cuando la vio, con cara de susto dijo—Anda mi madre que grande, date una
vuelta por el parquin antes de salir-- anda cantamañanas mete tu maleta en la
furgo que nos vamos – seguramente fue mi respuesta.
Descendimos
por el Valle del Loria hacia nuestra primera parada, Nantes, una bonita ciudad,
desde allí visitamos Angers, Saumur y Tous. Creo recordar que a este viaje ya
pudimos contar en Mari Toñi y su adorable esposo Don tomas, Tomasin para la
familia.
Nuestra
siguiente parada y subiendo por la Bretaña fue Brest, pudimos visitar
igualmente Quimper, pero antes hicimos una parada en Carnac, es un conjunto de piedras
del periodo neolíticos hará 4000 o 5000 años antes de Cristo, un sitio
espectacular, esos dias son de los que no se olvidan, buena compañía buena
comida yo personalmente me acordaba de mi padre ya que por esas tierras se
marcho a trabajar cuando yo nací. Gracias papa.
Siguiendo por Brest camino del monte San Michel,
creo que paramos en Saint Malo y Dinard. después de todo lo que habíamos visitado
en monte de San Michel fue la guinda que culminaba este pastel. Pero montaros
en la furgoneta que continuamos viaje
Nuestro próximo
destino era Chartres y ahí quería yo llegar con nuestra hermosa furgoneta,
poneros en situación uno de Orera con aquella furgoneta y al tiempo de meterla
en un parquin al lado del hotel, un francés que salió de la garita del
estacionamiento gritándome y diciendo que no podía entrar, la madre que lo
pario menos mal que se puso delante, la furgoneta no entraba por la altura.
Pues bueno aquí quería llegar yo, y
esta es la piedra que esta tarde me he quitado de nuestro próximo viaje a Aix
de Provence, he encontrado un parquin que admiten hasta 2 metros-2,20 metros y
3 metros de altura de vehículos. Sigo preparando el viaje.
Las
habitaciones del hotel en Chartres eran muy grandes, bueno solo una la mía la
otras decían que eran pequeñas, Tomasin --diciendo tengo que dejar las cosas en
el servicio.
Ya en Paris
cancelaron nuestro viaje de Paris a Madrid y nos llevaron a dormir a un hotel ibis,
esa habitación sí que era pequeña y no la de Chartres.
Recordar
los viajes terminan cuando los acabo de contar, pero este todavía no a
terminado y el otro no ha hecho más que empezar. Salud y anarquía.
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